08 Jun Cómo elegir americana
Prácticamente no existe un buen look que una americana no pueda convertir en grandioso. Son cómodas, combinan con casi todo tipo ropa y son perfectas para cada ocasión. Sin embargo, no siempre resulta fácil elegir aquella que se adapte perfectamente a nuestra figura. Hoy queremos daros precisamente unos truquillos básicos para que nunca más dudéis, y aprendáis para el resto de vuestras vidas, cómo debemos elegir americana.
Pautas infalibles para elegir americana:
1. Aprende a diferenciar una chaqueta de una americana
Si esto fuera una carrera universitaria, éste sería el curso de Primero de Americana. Generalmente llamamos chaqueta a todo aquello que usamos sobre la camisa, jersey o incluso chaleco. Pero no todas esas prendas que van «por encima» para darnos abrigo extra son iguales, y las que más confusión suelen causar entre ellas son las chaquetas de tipo sastre y las americanas.
Como su nombre bien indica, las chaquetas de tipo sastre provienen de la sastrería tradicional de Inglaterra (originalmente llamada ‘chaquet’ en inglés). Esta prenda se caracterizaba por tener un corte largo hasta las rodillas y con botones al frente.
Fue allá por el siglo XIX cuando los colonos exportaron esta prenda a América y revolucionaron su uso.
Sin embargo, su corte extra largo no era precisamente el más cómodo para los grandes recorridos a caballo. Así que se creó una opción más corta y versátil de su diseño al que llamaron ‘chaquet-americano’.
Por ello hoy en día diferenciamos las formales chaquetas de tipo sastre de las americanas en ese corte más actual, desenfadado, con bordes rectos y asimétricos. Por ejemplo, debemos usar chaqueta tipo sastre en trajes formales como nuestros trajes de novio y padrino, y podremos elegir americana para combinar con vaqueros en situaciones diarias o eventos informales.
2.Los hombros
Si la anterior regla era de Primero de Americana, esta es de Primero de Vestir. No importa si hablamos de chaquetas, americanas, camisas o camisetas ¡Presta atención a los hombros! Ahí sabremos si la talla es la correcta y dependiendo de como encaje su corte con tus hombros, así encajará con el resto de tu figura.
En este tipo de prendas es doblemente importante tener en cuenta los hombros porque «nacen» justo en este punto, debiendo tener muy en cuenta que la unión de la manga con la chaqueta esté justo entre la clavícula y el inicio del hueso del hombro. De esta manera, se obtendrá una espalda con forma ancha y cuadrada.
Además, debemos observar que la chaqueta caiga sobre ellos libremente, no debe quedar estrecha ni holgada y, sobre todo, debemos asegurarnos que no quede un hueco en la parte posterior al pecho, como si tuviera una percha en la parte interior.
3. Vigila la solapa
Hay una simple regla respecto a este detalle: el ancho de la solapa y la espalda serán inversamente proporcionales. Es decir, mientras más ancha sea la solapa, la espalda tenderá a verse más estrecha, y viceversa. Básicamente deberás pararte a pensar en cómo es tu cuerpo, qué partes prefieres destacar y/o que estilo quieres obtener.
En este sentido apuntar simplemente que, si lo que buscas es un estilo formal, evita las solapas con muescas o almenos que sean de bordes delicados o redondeados (tipo las de los esmoquin).
4. Cuestión de botones
Más allá de falsos mitos y asociaciones con la edad, lo realmente importante es centrarse en como estos pequeños detalles de las chaquetas influyen en las proporciones del cuerpo.
En toda chaqueta siempre hay un ‘botón principal’, que es el que siempre va abrochado (en la chaqueta de tres, es el del centro; en la de dos, el de arriba). Este botón debe caer ligeramente por encima del ombligo o a la altura de éste.
Más allá de la altura, elegiremos más o menos botones en función del efecto que queramos conseguir. Por ejemplo, si lo que queremos es acortar visualmente nuestro torso, elegiremos chaquetas de tres botones, de este modo se estrecha la abertura de la americana y visualmente dará la impresión de que el tronco es más corto.
5. El largo
Simple y llanamente debemos observar al elegir americana que ésta cae hasta cubrir el cierre del pantalón.
6. Una pinza aquí y otra allá
Aquí no hay reglas, las pinzas pueden estar en casi cualquier parte de la americana y permiten entallar en las zonas deseadas. También se pueden hacer a posteriori por un sastre para conseguir que la chaqueta elegida se adapte perfectamente a nuestro cuerpo.
7. Presta atención a las mangas
Otro punto importante a la hora de elegir americana será el largo de la manga. Éste debe llegar hasta las muñecas dejando por debajo de ella la distancia de un dedo para que sobresalga la manga de la camisa.
8. ¿Aberturas? Tu eliges.
Las aberturas traseras son una cuestión más bien de gustos a la hora de elegir americana. El único consejo que podemos daros al respecto es que las americanas con dos aberturas en el faldón trasero delimitan mejor la espalda, y además permiten acceder más fácilmente a los bolsillos del pantalón cuando llevamos la chaqueta cerrada.
9. Accesorios: Corbatas y pañuelos:
Estos detalles no son indispensables, pero darán un toque extra al look y hablarán mucho de ti. Un hombre que sabe complementar es un hombre elegante, que se cuida, sabe vestir y piensa en los detalles ¡Un gran hombre vamos!
Sólo debes tener en cuenta respetar la gama cromática, pero nunca usarlos del mismo color. Incluso está muy de moda usar colores totalmente contrapuestos de forma que llamen más la atención.
10. Hechas para lucirlas.
Cuida tu postura. Las americanas están precisamente pensadas para realzar los atributos masculinos (ensanchan hombros, abren pecho, estrechan cintura…), pero de poco servirá estar toda una tarde para elegir americana si no mantienes una postura erguida y elegante que te permita lucirla bien.
11. Ven a vernos
El último consejo que nos queda por darte es que nada funciona mejor que el consejo de un estilista profesional En nuestra tienda contamos con la experiencia necesaria y una increíble colección de americanas.
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